Uniremos a las víctimas de violencia de género con otras mujeres que tuvieron una vida exitosa por sus cualidades profesionales y artísticas. Las primeras saltan a los medios de comunicación por un hecho repugnante, y las segundas pasaron a la historia sin el protagonismo que merecían. UNA POR UNA. Por cada asesinato cometido contra una mujer, rescatamos del olvido a otra que no ha tenido la proyección social suficiente por cuestión de género.

¿Cómo puedes participar? Por cada víctima de violencia de género, puedes enviar un correo electrónico a jefatura@arcipreste.org con la siguiente información:
1. Nombre de la víctima. Breve reseña de la noticia en prensa. Evitamos publicar detalles del asesinato, simplemente se denuncia.
2. Nombre de la mujer olvidada: cuéntanos qué destacarías de ella, por qué crees que no aparece en los libros. Son muchas las mujeres científicas, artísticas, maestras, pedagogas, filósofas... Será divertido saber en quién pones tu mirada y por qué.
3. Autor o autora de la reseña: alumno/a, profe, padre o madre, personal de administración y servicios del centro... Cualquiera puede participar.

ÉSTE SERÁ TU HOMENAJE.

miércoles, 30 de octubre de 2013

Mª Ángeles y Nadia

Mª Ángeles fue asesinada por su marido hace unas semanas en Paiporta (Valencia). Tenía un hijo de 12 años. (Ver noticia).

Nadia Comanecci fue la primera gimnasta en conseguir un 10 y haber ganado 5 oros olímpicos, pero a pesar de eso está situada en el número 33 del ranking de los 100 mejores deportistas (Ver enlace).  Nadia es la primera mujer que aparece en la citada lista. 

Además, Nadia tuvo que huir de Rumania por presiones políticas.

A los 13 años obtuvo su primer logro. 

La entrada es de Laura Sainz Santamaría, que ha conocido este blog a través de Cati, nuestra profesora de Educación Física. Gracias por tu colaboración.

lunes, 28 de octubre de 2013

Rosario y Jocelyn

Rosario ha sido asesinada hoy mismo por su marido, que también ha matado al hijo de la pareja en Vila-real (Castellón). A continuación, se ha suicidado, según cuenta la Policía Nacional (ver noticia).

Jocelyn Bell no superó a los 11 años el examen de aptitudes para hacer una carrera superior universitaria, pero tuvo otra oportunidad a los 13. Se graduó en Glasgow en 1965, a pesar que su entorno le animara a abandonar, ya que era la única mujer en la licenciatura de física. Pero Jocelyn perseveró y empezó su tesis bajo la supervisión de su tutor Antony Hewish. Junto con él y otros colegas construyeron durante dos años un radiotelescopio para estudiar los quásares. En el 67, en sus rutinarios análisis de datos (120 metros de papel milimetrado con nuevos datos cada cuatro días), un buen día Jocelyn detectó una señal de radio proveniente del cielo, en forma de pulsos demasiado rápidos y regulares para proceder de un quásar, cada 1,3 segundos. Aunque la señal sólo ocupaba 2,5 cm en 121,8 m de papel gráfico, Bell reconoció su importancia y estudió los datos junto con Hewish.

Después de descartar que no fueran de procedencia terrestre o de satélites artificiales, de manera provisional se les bautizó como "Little green men" (Hombrecillos verdes). Cabía la posibilidad que fueran civilizaciones inteligentes que intentaban contactar con nosotros, debido a la increíble precisión de los pulsos.

Descartada esa hipótesis, ya que se descubrieron más señales del mismo tipo, el equipo Bell-Hewish lo atribuyó a la rápida rotación de unos cuerpos desconocidos hasta entonces, que llamaron púlsares. Jocelyn había descubierto las estrellas de neutrones, el remanente estelar dejado por una estrella supergigante después de explotar como una supernova. Esta explosión genera tanta energía en un solo segundo, como energía generará el Sol en toda su vida (10 mil millones de años). Las estrellas de neutrones tienen entre 8 y 25 veces más masa que nuestro Sol, pero en sólo 10 kms de diámetro, son objectos brutalmente densos.

En 1974 Antony Hewish compartió el Premio Nobel con Martin Ryle por "su papel decisivo en el descubrimiento de los púlsares". Aunque el trabajo del descubrimiento de los púlsares se publicó como Hewish, Bell (que fue de hecho quien los descubrió) y tres colaboradores, no se la tuvo en cuenta para el Nobel. Quizá por ser doctoranda, quizá por ser mujer... o por ambas cosas. En todo caso Walter Lewin mostró su indignación en la conferencia de ayer por esta vergonzosa injusticia.

A pesar de no tener el Nobel, Bell ha recibido numerosas distinciones y ostentado diversos cargos en el campo de la astrofísica. Actualmente es profesora visitante de astrofísica en la Universidad de Oxford y miembro del colegio Mansfield.

“Las mujeres y las minorías no deberían hacer todo el esfuerzo de adaptación. Es momento de que la sociedad se movilice hacia las mujeres, y no las mujeres hacia la sociedad”. (Jocelyn Bell, revista Science 304, p. 489, 2004).

La propuesta es de Mireia, jefa de equipo de educadores/as del Museo de la Ciencia de Barcelona. Gracias por tu colaboración.

Sabrina y Emilia

La Audiencia de Lleida ha condenado a un total de 24 años y nueve meses de prisión al asesino de Sabrina C., de 31 años, que la violó y estranguló el mismo día que estaba previsto que ambos acudieran al despacho de un abogado para firmar el convenio regulador del divorcio (ver noticia).

Emilia Pardo Bazán nació en La Coruña en 1851, fue una de las más entusiastas escritoras y trabajadoras de la época, reivindicando allá por donde iba su calidad de mujer y de intelectual. Varios son los títulos conocidos que perduran en el acerbo literario español de Emilia: los pazos de Ulloa, la madre naturaleza, la piedra angular, así como numerosos cuentos.

En ocasiones su obra es tachada de atea y subversiva, y eso le lleva a tener fuertes conflictos en casa con su marido, y posteriormente su separación con él. A partir de este momento Emilia posee más tiempo para formar parte de la vida política y cultural de la época, y reivindicar el papel de la mujer, quien, en muchas ocasiones, sugirió que la mujer era mucho más competente que cualquier hombre.


Su entusiasta forma de defender a la mujer le llevó a tener más que un enfrentamiento dialéctico con autores de su época como Valera, Galdós, o Jose María Pereda.

Funda en 1892 la Biblioteca de la mujer, y asiste a numerosos congresos donde lucha por una educación igualitaria para el hombre y la mujer. Consigue una cátedra para dar clases en la universidad, y es la primera mujer en presidir la sección de literatura del Ateneo de Madrid; sin embargo, Emilia fue rechazada en tres ocasiones por la Real Academia de la Lengua como miembro de la misma.

Sus obras muestran a mujeres con espíritu de cambio, revolucionarias, que llevan las riendas de su casa, y como no podía ser de otra manera para Doña Emilia, de su vida.

La aportación es de Mª José, profesora de Lengua y Literatura en el IES Los Olivos de Mejorada del Campo (Madrid). Es la primera entrada que recibimos de una persona de fuera del centro, por lo que se lo agradecemos especialmente.

sábado, 26 de octubre de 2013

Sorina y Sophie

También esta terrible semana nos enteramos del asesinato de Sorina en Torremanzanas (Alicante) a manos de su pareja (leer noticia). Más de 24 horas después, cuando acudió a un centro sanitario a curar sus heridas, los facultativos sospecharon y dieron parte a la Guardia Civil, cuyos agentes procedieron a su detención y ante los que confesó el crimen. Sorina acababa de terminar sus estudios en ingeniería técnica industrial en la UPV de Alcoy. Tenía sólo 26 años.

Sophie Germain nació en 1776 y fue hija de un rico banquero. En 1789 reinaba en París la Revolución francesa, así que fue confinada en su casa con 13 años. Pasaba horas en la biblioteca de su padre y quedó enamorada de las matemáticas.

Sus padres no la apoyaron. Consideraban que las jóvenes no debían molestarse en saber matemáticas. Incluso tomaron las decisión de quitarle toda la ropa y cualquier fuente de luz o calor para que no pudiera levantarse de la cama. Sophie  derrotó a sus padres. Fue autodidacta, disfrazándose de hombre para poder entrar a estudiar en lugares de matemáticos (donde solo dejaban entrar varones). Sus investigaciones y estudios, los autografiaba como "Sr. Leblanc", para ocultar su identidad. Entabló correspondencia y envió artículos, siempre bajo el seudónimo, con otros matemáticos de primer nivel como : Lagrange y Gauss. Al primero le impresionó tanto, que averiguó quien era y fue a su casa a decirle cuan impresionado estaba. Al segundo, probablemente le salvo la vida, al pedir al general francés Pernetti (amigo de la familia) que protegiera la vida de Gauss. Éste así lo hizo y le explicó a Gauss gracias a quién estaba a salvo. Ahí fue cuando descubrió su verdadera identidad y le  escribió una carta de absoluta admiración.

En 1816 ganó el concurso de la Academia Francesa de las Ciencias. Fue entonces cuando se convirtió en la primera mujer en recibir un premio de estas características, la primera mujer que asistió a las sesiones de la Academia Francesa de las Ciencias (aparte de las esposas de los miembros) y la colocó junto a los grandes matemáticos de la historia.

“Matemática es nombre de mujer”, Susana Mataix.

La propuesta es de Silvia, la profesora de Matemáticas.




jueves, 24 de octubre de 2013

Carolina y Aphra

Un hombre ha sido detenido en Cifuentes (Guadalajara) por haber asesinado a su pareja. La mujer desapareció el mes pasado y la Guardia Civil busca ahora su cuerpo (Leer noticia).

Este hecho es repugnante como todos los anteriores, pero al producirse tan cerca de nuestras casas nos conmueve aún más. Duele especialmente etiquetar esta entrada con el nombre de Guadalajara.

Aphra Behn fue la primera mujer que consiguió vivir de la literatura en lengua inglesa. Tras morir su marido sólo 3 años después de su matrimonio, tuvo que ganarse la vida y consiguió hacerlo utilizando su ingenio. Escribió la primera novela considerada antiesclavista (Oronokoo o El esclavo real, 1668). Su cinismo y actitud desinhibida en cuestiones sexuales y su exaltación de la pasión y el placer la hicieron muy popular. En sus obras trata preferentemente la relación entre el sexo y el poder, en la esfera personal y en la política. Su actitud independiente no se consideraba propia de una mujer, por lo que tuvo que soportar una cierta fama de libertina. Fue sepultada en la Abadía de Westminster y Virginia Woolf reivindicó su memoria en Una habitación propia con las siguientes palabras:

"All women together ought to let flowers fall upon the tomb of Aphra Behn, which is, most scandalously but rather appropriately, in Westminster Abbey, for it was she who earned them the right to speak their minds".

"Todas las mujeres deberían depositar flores en la tumba de Aphra Behn, (...) pues fue ella quien ganó para ellas el derecho de expresar sus ideas".

 Virginia WoolfA Room of One's Own / Una habitación propia

La entrada es de Alicia, la Jefa de Estudios.

domingo, 13 de octubre de 2013

Alba y Fanny

“No confundamos amor con posesión”, se podía leer en las pancartas en la concentración para la condena por el asesinato de Alba en Lleida el pasado 10 de octubre.

Alba tan solo tenía 14 años, y recibió presuntamente por su novio al menos diez puñaladas en cuello y tórax.

Los dos jóvenes habían mantenido una relación sentimental y, según el Instituto Catalán de la Mujer, continuaban siendo pareja. Según fuentes oficiales, no había denuncias previas sobre el agresor que presuntamente asesinó a la chica de Tàrrega, la víctima número 37 de violencia machista en 2013 y la más joven en lo que va de año.

Fanny Blankers-Koen era mujer, tenía dos hijos y estaba en el comienzo de un nuevo embarazo. Con 30 años, en la dura postguerra holandesa, era principalmente una ama de casa. Así la calificó la prensa de la época, no sin cierto desprecio en ciertos sectores. Poco importaba que Blankers-Koen fuera una estrella del deporte. Había participado doce años antes en los Juegos de Berlín, en los que fue quinta con el equipo holandés de relevos de 4x100 metros y sexta en el salto de altura. Cuando terminó la II Guerra Mundial, regresó a la competición con sus habituales señas de identidad: poderosa y versátil.
Llegó a los Juegos de Londres de 1948 con cuatro récords del mundo en su poder, aunque no pudo defender su liderazgo en las pruebas de salto de altura y de longitud. En aquellos días, las mujeres sólo podían participar en tres competiciones individuales, según la idea que se tenía de sus limitaciones físicas.
Blankers-Koen contribuyó más que ninguna otra atleta a acabar con estos prejuicios y con los otros, los sociales. Era madre de dos hijos, pero le gustaba correr y saltar, disfrutaba del placer de la competición y no creía que su condición de ama de casa le impidiera satisfacer aquello que les estaba permitido a los hombres. 
En aquel Londres sombrío de la postguerra, en el umbral de una nueva época social, Blankers-Koen no sólo ganó más medallas que nadie. Se ganó un puesto entre los héroes imperecederos.
 Por ello, Blankers-Koen hizo tambalearse todo el entramado de ideas preconcebidas sobre el papel femenino en el deporte y, por ende, en la sociedad. Se convirtió en una leyenda y contribuyó de modo decisivo a cambiar muchas ideas y mentalidades sobre el papel de la mujer, no sólo en el deporte sino también en la participación de la mujer en los asuntos públicos. Fue una pionera en lo que se ha venido en llamar emancipación de la mujer en un mundo diseñado por hombres. 
 
El camino se ha recorrido lenta pero de forma constante, pero hay que seguir en la brecha y luchando para que llegar al final. Fanny Blankers-Koen, "la holandesa voladora", que nos dejó en 2004, contribuyó con sus enormes dotes naturales, su determinación y constancia y su gran voluntad de trabajo a lograr ese objetivo final.

 La propuesta es de Cati, una de las jefas de estudios del instituto y profesora de Educación Física.